Está escrito: la libertad de expresión paso a paso en la historia constitucional de Bolivia
Un andamiaje fue por el que atravesó la historia constitucional de Bolivia desde 1826, con la primera Carta Magna redactada por el mismo Libertador Simón Bolívar y aprobada por el entonces presidente Antonio José de Sucre dictaminando a Bolivia como una República y que en su artículo 6 redacta puntualmente en el acápite sobre la libertad de religión que “(…) no hay poder humano sobre las conciencias”, hasta la vigente aprobada el 2009 tras un proceso Constituyente. Esta última detalla en su artículo 21 sobre Derechos Civiles que las bolivianas y bolivianos tienen derecho a:
- A la libertad de pensamiento, espiritualidad, religión y culto, expresados en forma individual o colectiva, tanto en público como en privado, con fines lícitos.
- A la libertad de reunión y asociación, en forma pública y privada, con fines lícitos. 5. A expresar y difundir libremente pensamientos u opiniones por cualquier medio de comunicación, de forma oral, escrita o visual, individual o colectiva.
Y un punto importante de la Constitución Política del Estado del 2009 lo detalla en este mismo punto de Derechos Civiles es su inciso 6:
“A acceder a la información, interpretarla, analizarla y comunicarla libremente, de manera individual o colectiva”.
Estos derechos están enmarcados en los convenios internacionales donde Bolivia ha sido firmante y por tanto es parte del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) y la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre que fue aprobada en la Novena Conferencia Internacional Americana celebrada en Bogotá en 1948.
Este convenio internacional establece:
Artículo 19
Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
En lo que respecta a los medios de comunicación, el Capítulo Séptimo de la vigente CPE detalla:
Artículo 106.
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- El Estado garantiza el derecho a la comunicación y el derecho a la información.
- El Estado garantiza a las bolivianas y los bolivianos el derecho a la libertad de expresión, de opinión y de información, a la rectificación y a la réplica, y el derecho a emitir libremente las ideas por cualquier medio de difusión, sin censura previa.
- El Estado garantiza a las trabajadoras y los trabajadores de la prensa, la libertad de expresión, el derecho a la comunicación y a la información.
- Se reconoce la cláusula de conciencia de los trabajadores de la información.
Y en el marco de la autorregulación de los medios de comunicación y periodistas, la Carta Magna establece:
Artículo 107.
- Los medios de comunicación social deberán contribuir a la promoción de los valores éticos, morales y cívicos de las diferentes culturas del país, con la producción y difusión de programas educativos plurilingües y en lenguaje alternativo para discapacitados.
- La información y las opiniones emitidas a través de los medios de comunicación social deben respetar los principios de veracidad y responsabilidad. Estos principios se ejercerán mediante las normas de ética y de autorregulación de las organizaciones de periodistas y medios de comunicación y su ley. 39
- Los medios de comunicación social no podrán conformar, de manera directa o indirecta, monopolios u oligopolios.
- El Estado apoyará la creación de medios de comunicación comunitarios en igualdad de condiciones y oportunidades.
Por tanto, la libertad de expresión, de opinión y de prensa está claramente ratificada a nivel nacional e internacional y es el Estado quien debe hacerla prevalecer.
Aunque un reciente informe de Reporteros sin fronteras de 2024, establece que los países en donde la prensa es más libre son Finlandia, Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Estonia, Irlanda y Suiza. Por el contrario, el país donde la libertad de prensa es restringida fue Eritrea, seguido de Siria, Afganistán, Corea del Norte, Irán y Turkmenistán.
El documento manifiesta que Bolivia cayó en el ranking mundial de la libertad de prensa del puesto 117 en 2023 al 124 en 2024 (al mes de mayo). Además, da cuenta que los ataques, las amenazas, la censura y el hostigamiento por parte del Estado y las fuerzas progubernamentales, atentan regularmente contra la libertad de prensa.